Regularización en RESICO para personas físicas: Evita multas y recargos. 

Si estás en el Régimen Simplificado de Confianza (RESICO) como persona física, seguramente has escuchado sobre la importancia de llevar al día tu declaración mensual. Sin embargo, la realidad es que por distintos motivos, a veces se nos pasa una declaración o nos encontramos con un mes fiscal que requiere regularización. ¡No te preocupes! Aquí te explico de manera sencilla qué implica regularizar un mes fiscal en RESICO. 

¿Qué es el régimen simplificado de confianza (RESICO)?

El RESICO es un régimen fiscal diseñado para personas físicas con ingresos relativamente bajos. Su principal ventaja es que ofrece tasas impositivas más bajas, con un Impuesto Sobre la Renta (ISR) que puede oscilar entre el 1% y el 2.5%, dependiendo de tus ingresos anuales. Además, este régimen busca simplificar las obligaciones fiscales, con cálculos y procesos más ágiles en comparación con otros regímenes.

¿Qué es la regularización de un mes fiscal?

La regularización de un mes fiscal es, en términos simples, la corrección o ajuste de una declaración que no fue presentada en su momento o que contiene errores. Regularizar implica ponerse al día con el SAT, ya sea pagando los impuestos correspondientes, ajustando cifras incorrectas o cumpliendo con las obligaciones que quedaron pendientes.

En el caso de RESICO, el SAT espera que cada mes presentes tu declaración, donde reportas tus ingresos y calculas el ISR correspondiente. Si, por alguna razón, te retrasas en una declaración, deberás regularizar ese mes para evitar multas y recargos.

¿Por qué podría ser necesaria una regularización?

Existen varias razones por las cuales podrías necesitar regularizar un mes fiscal en RESICO:

• Olvido: A veces, entre tantas actividades, se puede olvidar presentar la declaración de un mes.
• Errores en la declaración: Quizá ingresaste mal una cifra o cometiste algún error al capturar la información.
• Cambios en los ingresos: Es posible que detectes ingresos no reportados o gastos que no habías considerado.

Ejemplo práctico de regularización en RESICO. 

Imagina que María, una persona física bajo RESICO, no presentó su declaración correspondiente al mes de mayo. Durante ese mes, María tuvo ingresos por $50,000 pesos. De acuerdo con las reglas de RESICO, María debe pagar el 1.5% de ISR sobre sus ingresos, lo que representa $750 pesos.

Sin embargo, como no presentó su declaración a tiempo, ahora debe regularizar esa situación. María tendrá que pagar los $750 pesos correspondientes a mayo, pero además enfrentará:

1. Multa por no presentar la declaración: Aproximadamente $1,400 pesos.
2. Recargos: Un porcentaje adicional por cada mes de retraso.

De esta manera, la deuda original de $750 pesos se incrementa considerablemente debido a los recargos y multas.

Documentación necesaria. 

Para llevar a cabo la regularización de un mes fiscal en RESICO, necesitarás tener a la mano lo siguiente:

1. Información de ingresos: Toda la documentación que compruebe tus ingresos durante el mes a regularizar (facturas, recibos).
2. Clave RFC: Es indispensable contar con tu RFC actualizado.
3. Contraseña del SAT: Asegúrate de tener acceso a tu portal del SAT.

Particularidades del RESICO.

Algunas particularidades de este régimen que debes conocer incluyen:

• Sin deducciones: En RESICO, a diferencia de otros regímenes, no puedes deducir gastos. Esto significa que el cálculo de ISR se hace únicamente sobre tus ingresos, sin restar costos o inversiones.
• Declaración mensual obligatoria: No importa si no tuviste ingresos en un mes, aún así debes presentar tu declaración en ceros.
• Tasas bajas pero constantes: El ISR en RESICO es menor que en otros regímenes, pero se aplica mensualmente y no existen formas de reducir el porcentaje más allá del que te corresponde.

¿Qué pasa si no regularizas?

Si decides no regularizar tus meses fiscales, las consecuencias pueden escalar rápidamente. Además de las multas y recargos, podrías enfrentar auditorías del SAT o, en casos extremos, problemas legales por evasión de impuestos.

Otro aspecto importante es que si dejas pasar mucho tiempo sin declarar, podrías perder los beneficios de estar en el régimen RESICO, que justamente busca incentivar el cumplimiento de las obligaciones fiscales con tasas bajas.

¿Por qué dejar la regularización en manos de FIXAT?

En FIXAT, sabemos lo complicado que puede ser llevar al día las declaraciones fiscales, especialmente cuando se trata de regularizar periodos atrasados. Nuestro equipo de expertos en contabilidad y fiscalidad se encarga de todo el proceso por ti:

• Presentamos tus declaraciones: Nos aseguramos de que todos los documentos estén correctos y cumplas con tus obligaciones de manera puntual.
• Calculamos los impuestos correspondientes: Realizamos los cálculos para que no pagues de más y evites errores en tus declaraciones.

Conclusión. 

La regularización de un mes fiscal en el régimen RESICO es un proceso que debe atenderse de inmediato para evitar mayores complicaciones. Aunque puede parecer abrumador, lo importante es tomar acción cuanto antes y buscar la ayuda de expertos. En FIXAT, nos encargamos de todo el proceso para que no tengas que preocuparte por errores, multas o recargos innecesarios.

Si tienes un mes pendiente por regularizar, contáctanos hoy mismo y déjanos ayudarte a poner al día tu situación fiscal. ¡No dejes que las multas te alcancen!